Curtis
Mira cómo es Curtis
La historia de Curtis
Curtis nos llegaba una noche del pasado mes de Octubre de urgencia con síntomas de envenenamiento. Tras estabilizarle, ver que de carácter era intratable y no disponer de un hueco en el refugio ni casa de acogida para él tuvo que ir a la perrera. Una vez esterilizado y con test de inmunodeficiencia y leucemia felina negativo paso a convivir en el recinto con el resto de compañeros con los que no se lleva mal.
Curtis se ha hecho algo más confiado con el tiempo. Es un gato que mantiene las distancias pero que, a su manera, ha entendido que la gente que entra y sale del recinto no somos sus enemigos. Por el momento no se acerca al plato de la lata hasta que nos hemos alejado un poco pero al menos esta mucho más tranquilo que cuando llego. Sería estupendo que Curtis encontrara una casa con algún otro compañero felino y mucha paciencia.