Toscana
Mira cómo es Toscana
La historia de Toscana
Toscana ha sido rescatada de una colonia y la pobrecita está asustada se está desmejorando porque no come bien y se debilita se nota en uno de sus ojillos, lo tiene un poco tocado y solo necesita ponerse fuerte de nuevo y seguro que se le cura rápido.
No tiene muy claro ni dónde está ni lo que le va a pasar, así que reacciona con miedo, pero tenemos esperanzas de que con mimos y sobeteo se tranquilice y sea una gata casera y encantadora solo necesita que alguien le de la oportunidad.
ANIMAOS!!
Toscana lleva una temporada viviendo en los recintos exteriores sigue sin mimos, sin esa mano amiga que la tranquilice con caricias así la pobre no avanza.
Convive con otros gatos sin buscarlos, no quiere problemas así que tampoco los busca…a estas alturas y si nadie se anima a hacerle un hueco en su hogar y darle una oportunidad, hasta una finca con acceso al exterior pero donde se le vayan a dar las atenciones básicas, un refugio y alimento sería mucho más feliz…AYUDA!!
Han pasado 4 años desde que Toscana fue llevada a la perrera. Es hoy una gata adulta a la que pasar tanto tiempo en los recintos exteriores de la perrera no ha ayudado mucho. Sigue siendo huidiza, pero no corre, digamos que camina a paso ligero. No se relaciona tampoco con otros gatos; asi que podemos decir que pasa los días sola. A estas alturas nadie se ha interesado por ella y creemos que un caserio o finca en la que tenga las necesidades básicas cubiertas podría ser una buena opción para ella.
Ocho años en la perrera con sus ocho fríos inviernos son muchos años para que la salud de Toscana no se resintiera.
Hace un tiempo comprobamos que algo no iba bien, Toscana habia perdido algo de peso y tenia dificultad para respirar así que la llevamos a clinica. En principio vieron que tenia un bronquitis y la pusieron en tratamiento, además vieron que la boca le estaba dando problemas y le han quitado todas las piezas. Actualmente esta estable y si nada lo impide volverá a los recintos exteriores
Nos da muchisima pena que por su edad y carácter nadie pregunte por ella. Ya casi es una abuelita y no es una gata para disfrutar ya que ella pasa gran tiempo escondida , no es una gata a la que poder mimar pero no por ello deja de merecer un hogar donde envejecer tranquilamente. Quien sabe, los gatos fuera del estrés de la perrera pueden llegar a sorprendernos. ¿Habrá alguien dispuesto a darle a Toscana la vejez que se merece?